Argentina, entre los cinco países con mayor evasión fiscal

Por Juan Cruz Guido en la Agencia Paco Urondo. Un informe de la Tax Justice Network ubica a la Argentina entre los cinco países donde las empresas multinacionales más divisas fugan. La lista la completan países de alta actividad económica como Estados Unidos, China, Japón e India. La desinversión como política de Estado.

En línea con lo publicado la semana pasada por la AGENCIA PACO URONDO, donde describíamos la funcionalidad de la Unidad de Información Financiera en el entramado de fuga de divisas y lavado de activos, se conoció un informe de la Tax Justice Network (TJN) donde se reseña la evasión fiscal por parte de las empresas multinacionales. En ese sentido, la coalición independiente de investigadores y activistas que se agrupan entorno a la red TJN, publicaron un listado con los 102 países de los cuales pudieron recabar información financiera.

El informe, realizado por Alex Cobham, director Ejecutivo de TJN, y el economista Petr Janský, ubica a la Argentina en el quinto puesto, rodeado de las grandes economías del mundo. Comparte el podio con Estados Unidos, China, Japón e India. De manera evidente, y de hecho es enfatizado por los investigadores, el caso argentino resulta llamativo ya que su Producto Bruto Interno es considerablemente inferior al de los países mencionados. La fuga de divisas y ganancias por parte de las empresas multinacionales representa para la economía argentina una relación del 4,4% de su PBI. La cifra exacta de lo que dejó de recaudar la Argentina para el año 2016 escala a la suma de 21.406 millones de dólares.

Las maniobras para garantizar estas fugas de capital cuentan con logística interna y externa. De modo que las acciones tendientes a la evasión necesitan de servicios contables y jurídicos que la posibiliten. La investigación realizada por el organismo señala las operaciones de “profit shifting”, mediante las cuales las compañías que operan a los largo del globo mueven sus ganancias de países con altos niveles impositivos a plazas financieras con baja o nula carga tributaria. Dicha operatoria fue descripta de manera precisa por una investigación que realizó la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) a cargo, en ese momento, de Carlos Gonella. Allí se describió como el Hong Kong and Shangai Banking Corporation (HSBC) fugó capitales a través de cuentas fantasmas, que el banco omitió deliberadamente informar a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).

Un dossier de la Tax Justice Network (TJN), previo a la filtración de los Panamá Papers, ya señalaba las conexiones locales e internacionales encargadas de las maniobras espurias. Según James Henry, autor del estudio donde se estima el dinero escondido en paraísos fiscales, estos activos fugados están «protegidos por un grupo diligente y bien pagado de agentes en la banca privada y en empresas legales, de contabilidad e inversiones que tienen ventajas crecientes en la economía mundial cada vez más sin fronteras ni fricciones».

A la luz de los hechos, queda claro que con el cambio de gobierno y de autoridades en la UIF, unidad encargada de investigar estos hechos delictuales, la línea es amigable a la evasión y la no inversión de ganancias por parte de las empresas multinacionales. Un informe del Observatorio de la Riqueza Padre Arrupe señala que “Argentina es el primer país del mundo en evasión impositiva per capita”. Según lo consignado por el Observatorio, en el 2016“las multinacionales en Argentina evadieron por impuestos el 4.4% del PBI, e invirtieron el 0.9% del mismo.” La cifra es significativa si se la compara con el 2015, cuando por una decisión de política económica se las obligaba a invertir el 2.25% del PBI. Para ilustrar las diferencias con otros países del mundo y de la región, el documento subraya que “en China se invierte el 40%, en Brasil el 25% y en América Latina el monto de inversión se encuentra en un 18%”. De esta información se desprende que “Argentina es el país que menos invirtió en el 2016 y que, por el contrario, más fugó”. En ese sentido, el informe arriesga una conclusión advirtiendo que la causa de la evasión sistemática se debe “a la destrucción del mercado interno, que no justifica ninguna inversión privada”.

 

 

Creación de la moneda complementaria PAR en Argentina

¿QUÉ ES PAR?

Es un sistema de intercambio de bienes, de servicios, de tiempo y también de crédito mutuo, que usa como medio cancelatorio de obligaciones a la moneda virtual MONEDAPAR ($PAR).

Es un sistema que permite relacionar recursos con necesidades, mediante un sistema voluntario y transparente de intercambio.
Es un sistema que incentiva el trabajo, recibiendo a cambio $PAR, que se puede intercambiar por productos y servicios de empresas, comercios y entidades que voluntariamente aceptan este sistema de Intercambio.

¿QUIÉNES SOMOS?

El Sistema PAR es una iniciativa coordinada por el Ing. Mario Cafiero, del Observatorio de la Riqueza Padre Arrupe; por Eduardo Murúa del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas por los Trabajadores; y por Matías Romeo y Pablo Tutino de Waba grupo técnico de desarrollo de criptomonedas.

Se ha invitado a diversas personas y organizaciones a participar de la iniciativa y a crear una Asociacion Mutual PAR de conformidad a la ley 20.321, que tendrá su Reglamento de Funcionamiento.

¿CÓMO FUNCIONA PAR?

Sistema de Crédito Mutuo

En un sistema de crédito mutuo donde sus integrantes disponen de un monto de crédito, en forma de descubierto, sin interés.

El monto del crédito es determinado por acuerdo de los mismos miembros de la Asociacion, es decir son los miembros de la comunidad los que se dan crédito para poder comerciar entre sí.

La moneda utilizada en una transacción se crea en el momento de la transacción. La suma de todos los créditos sería como la base monetaria del sistema. La base monetaria se autorregula en función de los límites que fijan los mismos miembros que conforman el sistema. Las transacciones son entre personas o empresas; y no median intermediarios. Las transacciones son en $PAR, en forma digital, como si fuera dinero al contado.

SISTEMA BASADO EN UN INTERCAMBIO RECIPROCO

Cada miembro del sistema PAR dispone de una cuenta corriente individual. La administración del sistema PAR lleva la contabilidad de cada cuenta corriente y el sistema de clearing de todas las cuentas corrientes. Los saldos de cada cuenta son de conocimiento público.

Si el saldo individual es positivo, ese miembro es acreedor del sistema, y puede gastar ese saldo en compras en el sistema. Si el saldo es negativo, ese miembro es deudor del sistema, y debe devolverlo vendiendo productos y servicios en el sistema. Los precios, calidad, forma y plazo de entrega son de libre acuerdo entre comprador y vendedor.

Todos tienen algo que aportar a la comunidad. Todos somos consumidores, pero también productores de bienes y/o servicios. Es condición indispensable para la inscripción al sistema que el miembro declare que bienes y servicios va a ofrecer al sistema. Todos somos PROSUMIDORES que hacemos un intercambio recíproco. Intercambio recíproco significa que cada miembro debe poner en el sistema (por la realización de ventas) al menos lo que saca del sistema (al hacer compras).

Billetera digital

El medio para realizar los pagos y cobros es una billetera digital. No existen billetes ni monedas, sino un sistema de cuenta basado en blockchain que es utilizado desde una aplicación móvil.

  • ¿Por qué un sistema digital basado en blockchain?
  • No se puede falsificar la moneda y se asegura a través de criptografía.
  • Se tiene control central del crédito de los participantes.
  • Se tiene un registro contable público: se conoce en todo momento de las tenencias de todos los participantes del sistema. Brinda transparencia.
  • La billetera se descarga al celular y funciona como un banco en el bolsillo.
  • Las cuentas no se pueden bloquear ni freezar

> Ver más en la plataforma Moneda PAR.

Informe sobre el balance del Banco Central de la República Argentina

Por Nestor Forero. Hemos  realizado un estudio sobre el balance presentado por el Banco Central de la República Argentina al 31/12 2016 comparado con el correspondiente al período que cerró el 31/12/2015, con el fin de clarificar en materia monetaria la verdadera herencia recibida.

Resulta alarmante el deterioro de las cuentas públicas en solo un año y la continuidad de políticas severamente criticadas durante la campaña presidencial.

El estudio está resumido en 10 puntos, a saber:

1)      El Patrimonio Neto del BCRA  medido tanto en pesos como en dólares ha disminuido durante el año 2016. Si bien la devaluación realizada a fines del 2015 ha aumentado el valor de las reservas en pesos; a fines del 2016, el patrimonio neto de la entidad disminuyó en 42.723 millones de pesos, un 24.09% y medido en dólares en U$S 5.148 millones. Una disminución  del orden del 37,74% en solo un año. Situación que enciende las señales de alarma.

2)      Las Reservas Internacionales han tenido un crecimiento importante, hasta alcanzar los 38.000 MD, pero dicha magnitud de aumento prácticamente se iguala con la mayor contracción de deuda a través de los títulos emitidos por la entidad, mediante las denominadas Lebacs. Debe hacerse mención que las Lebacs hasta el mes de noviembre tenían un crecimiento superior a las reservas que ha menguado por los efectos de  los ingresos producidos por el blanqueo. Ha sido intención de las autoridades monetarias disminuir el stock de deuda antes de que se torne inmanejable (ver punto 10).

3)      Los denominados activos intraestatales  han tenido un crecimiento a pesar de las críticas que esa política implementada por el gobierno anterior había sufrido por los principales referentes económicos  de la actual administración. Así los títulos públicos en poder del BCRA crecieron en 230.591 millones de pesos, un 26% en relación a las tenencias a fines del 2015. Por su parte, los Adelantos Transitorios a la Tesorería crecieron en más de 50.380 millones de pesos, un 15% más comparados con la administración anterior. Llama la atención dado la vocación de la actual administración en financiar el déficit fiscal mediante la contracción de deuda externa que, sin embargo,  también se ha hecho uso del recurso de acrecentar el endeudamiento de la Tesorería del Gobierno Central con el B.C.R.A.

4)      Las Reservas Internacionales, si bien han crecido durante el año, solo cubren el 26% de la totalidad de los pasivos del Banco Central.

5)      La Base Monetaria creció en un 31% con respecto al año 2015, guarismo inferior a la inflación estimada en 41%, ello obedece a una decisión  implementada por las autoridades del Banco, que para frenar el crecimiento de la inflación implementó la política monetaria de secar la plaza de fondos, produciendo escasez de efectivo con la consecuente alza en la tasa de interés y caída del consumo de los sectores más vulnerables.

6)      El coeficiente entre Base Monetaria vs. Reservas Internacionales arroja un valor de 1.3368, que significa que por cada dólar en reserva circulan 1.3368 pesos.

7)      El cuestionado índice de convertibilidad peso / dólar arroja un valor cercano a $ 21 por cada dólar.

8)      Los pasivos de la entidad aumentaron en 783.809 millones de pesos, un 44%, guarismo superior a la inflación y al crecimiento de todos los activos.

9)      Medido el Patrimonio Neto contra el Activo arroja un resultado de 5.53%, es decir, que solo el 5% de los bienes de la entidad, verdaderamente le pertenecen, el resto debe cubrir las deudas contraídas. Ese guarismo el año anterior arrojaba un porcentaje del 9.81%. El deterioro en el valor patrimonial de la entidad queda así explícito.

10)   Se ha anunciado que la Tesorería saldrá al rescate del BCRA (Ámbito Financiero del 16/01/17) mediante la cancelación de Lebacs en poder de los bancos privados y su sustitución por Letras de Tesorería (Letes), cuyo rendimiento no podrá ser inferior a 5 puntos básicos superiores al actual rendimiento de las obligaciones del Central, lo que llevaría la tasa al 29%, coherente con la parida teórica peso / dólar de $ 21. El incremento de la tasa fijaría un nuevo piso para el mercado, incrementando la recesión, el endeudamiento de las empresas locales y  familias, y el deterioro en la salud de millones de argentinos que padecen la actual situación económica.

Deuda externa: «Es impagable y condena a generaciones enteras a vivir para pagar intereses usurarios»

Por Pedro Biscay, director del Banco Central y ex coordinador del área de Fraude Económico y Bancario de la PROCELAC, publica en AGENCIA PACO URONDO un texto que forma parte del próximo número de la revista Observatorio de la Riqueza Padre Arrupe.

“Una civilización que se cree incapaz de resolver los problemas causados por su funcionamiento, es una civilización decadente.
Una civilización que opta por cerrar los ojos ante sus problemas más cruciales es una civilización violada.
Una civilización que traiciona sus principios es una civilización moribunda”
Aimé Césaire en el “Discurso sobre el Colonialismo”, 1950

En el Discurso de Argel, el Che Guevara se preguntaba “…¿Cómo puede significar “beneficio mutuo” vender a precios del mercado mundial las materias primas, que cuestan sudor y sufrimiento sin límites, a los países atrasados y comprar a precios de mercado mundial las máquinas producidas en las grandes fábricas automatizadas del presente?…” . Pasaron 52 años de aquellas jornadas y la pregunta mantiene toda su 2 vigencia. Las luchas de liberación nacional de los pueblos africanos bajo dominio colonial francés, no eliminaron las prácticas colonialistas, simplemente transformó sus formas. La diáspora africana alrededor del mundo está denunciando y clamando con urgencia por el cese de las mismas.

La esclavitud, la trata de personas y el comercio de esclavos estuvieron en el corazón de las relaciones comerciales durante gran parte del S. XVIII. Cerca de 12 millones de africanos fueron vendidos como fuerza de trabajo esclava, sólo por tomar a Inglaterra como destino. En 1807 se firmó el Acta de Comercio de Esclavos y en 1833 el Acta de Abolición de Esclavitud que establecía penalidades de multas y confiscación para el tráfico de personas esclavizadas. Junto con la firma del acta se reconocieron compensaciones por esclavitud a unos 46 mil dueños de esclavos (unos USD 30 millones, aprox. USD 3 mil millones a valores actuales). Actualmente, en América Latina y África, el tráfico de personas y la trata con fines de explotación sexual y laboral son formas comerciales altamente lucrativas ligadas a la criminalidad organizada. ¿Acaso no era criminal el tráfico de esclavos? ¿Acaso no era una forma organizada de criminalidad?

¿Es posible pensar África y América Latina por separado? En ambos continentes anidan prácticas sistemáticas de saqueo sobre los recursos naturales y las riquezas que reflejan el pleno S. XXI la esencia más profunda del colonialismo. Ejecutado en el pasado sobre la base de escopetazos y azotes, así como en el presente bajo la administración de los negocios e intereses estratégicos en manos de elites, burocracias locales y tecnocracias rentadas, el secreto que las mantiene vivas es el silencio de los opresores y la complicidad moral de aquellos que aceptan a aquellos de buen modo.

En el prólogo a “Los condenados de la tierra”, el crudo libro de Franz Fanón, Jean Paul artre escribió “…no nos convertimos en lo que somos sino mediante la negación íntima y radical de lo que han hecho de nosotros…” La historia monetaria de los países africanos que integran la Comunidad Financiera Africana – CFA (siglas fácilmente reemplazables por Colonias Francesa Africanas), es una historia olvidada, que tuve la oportunidad de descubrir a raíz de algunos vínculos con quienes, dentro de la diáspora africana, se hacen llamar la “generación consciente”. Hijos de generaciones africanas que llevan tiempo viviendo en Europa y otras partes del mundo y que decidieron decir basta al sistema de saqueo que las potencias ejecutan en sus países.

El Franco CFA es la moneda que rige en catorce países y que durante el año 1945 3 firmaron el tratado de la Unión Monetaria de África en virtud del que se fueron generando una serie de instituciones regionales como el Banco Central de los Estados de África Occidental – BCEAO.

Seis ejes fundantes definen este modelo: a. inconvertibilidad monetaria; b. libre movilidad de capitales; c. tasa de cambio fijo; d. centralización de las reservas internacionales disponibles de los países en el orden del 50% para cada estado y administrado por el tesoro de Francia a través de la cuenta de operación monetarias; e. establecimiento de una meta de inflación en el orden del 3% por parte de un comité de la Unión Monetaria y Económica de África Occidental y; f. establecimiento de exigencias fijas de capital de reserva mínima que deben cumplir los bancos, definidos también por instancias externas a los responsables de cada país.

El Franco CFA no es más que el establecimiento de un sistema de enclaves monetarios que beneficia al poder económico francés y algunas elites locales africanas, responsables del saqueo de sus riquezas naturales y de la corrupción sobre los recursos públicos. La consecuencia de esto es una política monetaria restrictiva y que piensa más en los intereses de los saqueadores de riquezas que en la dignidad y libertad de los pueblos.

Desde el año 2000 las economías subsaharianas han crecido a un promedio del 5,9% del Producto Bruto Interno (incluso a un ritmo superior que América Latina); crecimiento que tal vez no registre antecedentes por su magnitud y velocidad dado que durante los primeros años de la independencia el crecimiento de la región había alcanzado el 2,4% en promedio y luego en los años setenta con un aumento promedio del orden del 4%, mientras que en el período de reformas de mercado alcanzó el nivel del 2%. El último informe de Política Monetaria del BCEAO refleja una tasa de 4 crecimiento real del PBI cercano al orden del 6%. El Banco Mundial, en su informe 5 anual por país ubica a África subsahariana dentro de las economías de mayor crecimiento a nivel global en su PBI en el período 2000/2010, registrando en el año 2004 un pico de 11,65%. Los datos para el año 2015 registraron crecimiento 6 promedio del 3%.

Todos estos países cumplen a raja tabla las exigencias de un 3% de inflación impuesta por la Unión Económica y Monetaria de África Occidental. Sin embargo, ninguno de estos datos refleja la realidad dado que no se percibe el impacto social positivo que dichos indicadores debieran generar en la sociedad. Seguramente, algunos acusarán que la corrupción es el corazón del problema, puesto que estos países ocupan los lugares peor calificados por Transparency International. Disiento con ello. Este tipo de respuestas simples, por cierto, pretende moralizar un problema político que nada explica, pero es útil para ocultar aspectos centrales de la colonización monetaria en África. Los dos lados de la moneda pueden describirse rápidamente del siguiente modo: de un lado, fuertes exigencias de austeridad sobre la circulación monetaria, estricto control del déficit público, del sistema de precios y del nivel de los salarios. Del otro lado de la moneda, una libre fluidez para el retiro de capitales y de riquezas generadas en estos países, condición indispensable (según afirman) para que lleguen las inversiones necesarias para el desarrollo. Obviamente cada lado de la moneda tiene sus protagonistas: de un lado, la pobreza y la escasez, del otro lado, la fuga de capitales oculta en paraísos fiscales. Allí se esconde la riqueza expropiada a los pueblos del África. Exactamente en el mismo sitio que se esconde la opaca riqueza del mundo. Panamá Papers ofrece una pista útil que arroja transparencia respecto del quienes y del cómo.

Si pensamos en los dos continentes, no es difícil percibir rápidamente que, tanto en África como en América Latina, el mismo mecanismo de saqueo genera daños irreversibles para la sociedad. Según los datos proporcionados por Global Financial Integrity, entre 2004 y 2013 desde la Argentina se fugaron alrededor de USD 7.650 millones. En el mismo período, de los países miembros del Franco CFA se fugaron riquezas por el orden de los USD 66.305 millones.

Según estudios realizados por Tax Justice Network, la fuga de capitales a nivel global alcanzó la suma de USD 7.6 trillones incluida China. Para el caso argentino, la misma organización calcula un acumulado de riquezas ocultas en paraíso fiscales superiores a los USD 399 mil millones.

El llamamiento a poner fin a los paraísos fiscales y a la opacidad financiera se vuelve cada día más urgente, porque se trata de poner fin a los instrumentos que usan los grandes capitales financieros para esconder riqueza y generar pobreza. También se vuelve cada día más urgente condenar la riqueza y la opulencia porque es imposible alcanzar consensos básicos de igualdad y equidad social si el dinero representa un instrumento para la generación de desigualdad y violencia social. Es imposible un mundo con justicia y respeto por la calidad de vida y la libertad humana si persisten modelos monetarios como el Franco CFA que prohíben que cada uno de los países que integran la unión puedan definir autónoma y soberanamente sus políticas monetarias, financieras y crediticias.

José Martí, líder de la Independencia cubana, en ocasión de la Conferencia Monetaria convocada por Washington en el año 1888, decía que “…el pueblo que compra, manda. El pueblo que vende, sirve. Hay que equilibrar el comercio, para asegurar la libertad. El pueblo que quiere morir, venda a un solo pueblo y el que quiera salvarse, venda a más de uno. El influjo excesivo de un país en el comercio de otro, se convierte en influjo político. Cuando un pueblo fuerte da de comer a otro, se hace servil de él. Cuando un pueblo fuerte quiere dar batalla a otro, compele a la alianza y al servicio a los que necesitan de él. Lo primero que hace un pueblo para llegar a dominar a otro es separarlos de los demás pueblos…”

Al igual que las palabras del Che en el Discurso de Argel el pensamiento de Martí tampoco pierde vigencia: hasta ahora cada vez que se intentó doblegar la dominación del colonialismo monetario en países africanos, las respuestas imperiales fueron los golpes de estado y las matanzas. El 61% de los 67 golpes de estado en África tuvieron lugar en las ex colonias francesas, esto podría indicar que fueron perpetrados con el auspicio de potencias que gobiernan el destino de estos países.

La libre movilidad de capitales también tiene su contracara en el endeudamiento externo que es el mecanismo que el pensamiento hegemónico en materia económica nos ha impuesto como solución para financiar el presupuesto de los Estados, siempre doblegándolos con la carga de los intereses y, sobre todo, poniendo bajo sospecha el uso del presupuesto público como herramienta genuina y menos dolorosa. Por ello, tampoco es posible un mundo con justicia si, los organismos financieros internacionales y los mercados de deuda, fuerzan a los países a sustituir fuentes de financiamiento público interno por colocaciones de deuda de largo plazo. En un contexto de mayor incertidumbre política global (Brexit y Trump a cuestas, sumados a las insinuaciones del Frexit), Bélgica, al igual que Irlanda y México, emitió bonos del 9 tesoro con vencimiento a 100 años. Asimismo, ya se han emitido deuda a 50 años, el caso de España (al 3,45% -vto.2066- y al 4% -vto. 2064-), Francia (al 1,75% -vto.2066- y al 4% -vto.2060-), Austria (al 3,8% -vto.2062-), Italia (al 2,8% -vto.2067-) y también Bélgica (al 2,15% -vto.2066).

Los lobos de Wall Street miran con codicia los índices de rendimiento de mercados emergentes publicados por el coloso financiero y nuestro país que ha entregado su destino a la avaricia impúdica de algunos de los representantes más destacados de las finanzas, hacen todos los esfuerzos posibles por cumplir con estos estándares. En África sucede lo mismo. El informe de política monetaria lo revela en la medida que analiza la evolución del índice MSCI para economías emergentes.

Durante los años ochenta y noventa la deuda de los países del tercer mundo agobió la posibilidad de desarrollo de los pueblos. Durante los últimos años hemos logrado en el caso de Argentina reducir los niveles de endeudamiento a valores históricos (logramos bajar de un 160% del PBI a uno 45% aprox.).

Sin embargo, el nuevo gobierno del actual presidente y empresario Mauricio Macri generó las condiciones para imponer nuevas formas de endeudamiento. Sólo en un año (2016) nuestro país tomó deuda por el orden de los 45 mil millones de dólares. Esas deudas son impagables y condenan a generaciones enteras a vivir para pagar intereses usurarios impuestos por corporaciones financieras. Este año se prevé tomar más deuda (en sólo un mes se tomó deuda por el orden de los 22 mil millones) hasta un valor superior a los 80 mil millones de dólares.

Los datos de endeudamiento externo de los países que están bajo dominio del Franco CFA revelan una situación similar. Según informa Bloomberg, Malí deberá pagar en los próximos 12 meses deuda por el orden de los 216 millones de dólares. Costa de Marfil deberá pagar en los próximos 12 meses aproximadamente unos 620 millones de dólares. La relación deuda / PNI es del 49% para el 2015. En Burkina Faso también se deberá pagar deuda externa en los próximos 12 meses: 165 millones de dólares.

El endeudamiento externo de todos los países de la CFA alcanza los 45 mil millones de dólares. Mientras durante los años 2004/2006 se redujo la deuda al orden de 39 mil millones, desde ese momento en adelante volvió a crecer. Sudáfrica, tal vez visto como uno de los modelos del continente, su deuda externa creció velozmente desde el fin del apartheid en adelante, alcanzando valores cercanos a los 150 mil millones de dólares para el 2015.

Se estima que el Tesoro de Francia, a través del sistema de confiscación surgido de los acuerdos del año 1973 sobre la cuenta de operaciones, administra alrededor de 500 mil millones de Francos CFA por año. Toda esta masa de dinero procedente de las reservas de Benín, Burkina Faso, Costa de Marfil, Camerún, República del Congo, Gabón, Guinea Bissau, Guinea Ecuatorial, Malí, Níger, Senegal, Chad y Togo implica una inyección de liquidez gratuita para el tesoro francés.

El hecho es preocupante porque el desempeño de las reservas internacionales de todos los países del CFA ha mejorado significativamente durante los últimos años, especialmente desde el año 2004.

Por el lado de los países que conforman el corazón del imperialismo financiero, la crisis financiera de 2008, lejos de haber quedado atrás, continúa generando consecuencias negativas. Proyecciones de algunos miembros del Banco de Inglaterra indican que ese país continuará con sus planes de austeridad durante -al menos- los próximos diez años. Las políticas de tasas de interés negativas o cercanas a cero, que han sido utilizadas para amortiguar los efectos destructivos de la crisis financiera, reflejan también que las clases medias de esos países ven comprometidos sus ingresos y los estándares de vida. Todo esto indica que la dimensión de la crisis alcanzó el corazón de los países imperiales y las políticas monetarias expansivas no logran revertir la deflación y la destrucción del salario de los trabajadores.

Cuando la crisis financiera se perpetúa en el corazón del capitalismo financierizado, recrudecen las condiciones de explotación, saqueo e intervención militar en los países subordinados. El planteo de esta hipótesis clásica sobre la teoría del imperialismo, recobra vigencia en este contexto. No hay independencia que valga porque debe ser domesticada. Vemos en muchos pueblos de África el permanente recurso de la persecución y asesinato de líderes políticos, las guerras civiles internas promovidas por los países centrales para su provecho; del mismo modo que en América Latina, vemos persecuciones políticas a través del entramado judicial, en Brasil y Argentina, o el hostigamiento permanente al proceso político venezolano, que no son más que expresiones actualizadas de los golpes blandos ocurridos en Paraguay y Honduras durante la última década.

En el caso puntual de Argentina, la inédita persecución desplegada por algunos sectores del poder judicial alcanzó el paroxismo con la condena dictada contra Milagro Sala (electa como diputada en representación de argentina en el Parlamento del Mercosur) sin que existan elementos de cargo a tal fin y la prisión preventiva dictada en otras causas penales que fueron “fabricadas” al sólo efecto de mantenerla presa, como condición de gobernabilidad en su provincia de origen, tal como ha expresado públicamente el aliado político del actual gobernador Morales. Dicho sea, la verdad es que Milagro Sala permanece presa (a pesar de las llamadas de atención de Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la OEA) por el solo hecho de haber desafiado a las oligarquías locales ligadas al negocio del azúcar (puntualmente, la familia Blaquier).

Enfrentar la moneda en su forma de dominación mundial nos plantea grandes desafíos y un largo recorrido lleno de resistencias. Durante los últimos cuatro años, Argentina sufrió el acoso permanente de poderes especulativos que utilizaron el dólar para doblegar la moneda nacional, con el fin de provocar devaluaciones y desestabilizar políticamente al gobierno de Cristina Kirchner. El Banco Central de la República Argentina fue objeto de críticas muy agudas por parte del establishment financiero, que acusando falta de independencia provocó que un juez prohíba al Directorio del Banco Central, realizar políticas que permitan que la tasa de cambio entre el dólar y nuestra moneda coincida con aquella que el buen manejo de la economía necesita. Es decir, se impidió judicialmente regular el valor de la moneda incluso en contra del mandato constitucional que expresamente establece que esa función corresponde al Congreso (aunque se entiende como una de las funciones delegadas en un órgano específico, como es el BCRA). Además, se nos inició un juicio criminal por haberlo hecho en el que, desde la ex Presidenta, el ex Ministro de Economía, el ex Presidente del BCRA y el resto de los miembros del Directorio, estamos acusados por delitos graves como el de administración fraudulenta del erario público. Mientras tanto, el partido gobernante -que diseñó y presentó la acción legal por las operaciones de dólar futuro (política adoptada por el BCRA para regular la cotización de la moneda frente al dólar)- compraba contratos y se benefició con la liquidación de los mismos cuando, ya siendo gobierno, provocó una devaluación del orden del 40%. Un evidente conflicto de interés.

En términos precisos, Argentina como parte de América Latina no está muy lejos de la realidad africana porque en nuestro país estamos también impedidos de tomar decisiones soberanas sobre nuestra moneda nacional. Estamos siendo privados del ejercicio de esa dimensión tan precisa de la soberanía de un país, como es el establecer el valor de su moneda.

¿Qué diferencia hay entre un Peso argentino cuyo valor no puede ser determinado por la autoridad monetaria y es determinado por el poder económico y un Franco CFA cuyo valor permanece inalterado por orden de representantes del gobierno francés? No existen diferencias, pero sí semejanzas. Entre ellas, el peso de los principales exportadores de productos destinados en casi su totalidad a Francia (alrededor del 60%). Ellos necesitan que la moneda nacional sea un activo controlado según sus intereses.

Desde los años setenta en adelante, gracias al auge de la desregulación financiera y la liberalización de los mercados, las finanzas han carcomido paulatinamente la democracia, a veces directamente con golpes de estado e intervenciones militares como ocurrió en Argentina en el año 1976 (justo un año antes de la modificación de la Ley de Entidades Financieras que establece las relaciones, deberes y obligaciones de los bancos y compañías financieras autorizadas a operar en el país), otras a través de la ocupación de tecnocracias como se intentó en el año 2001 a partir de la proposición de un comité de expertos para administrar las finanzas y el tesoro público del país.

Defender hoy la democracia requiere de un estricto control de las finanzas y una renovación de las relaciones monetarias basadas en un acuerdo sólido entre países oprimidos para articular en mejores condiciones frentes de acción contra la dominación financiera impuesta por el peso propio que el dólar y, en el caso africano, poseen monedas como el Franco CFA ligado indisolublemente al Euro (y bajo hipótesis Frexit al Franco francés).

Asumir este desafío implica mayores compromisos con nuevas reglas de juego. Mayor integración, pero sobre la base de la complementariedad estratégica y la planificación.

No sobre la libertad de mercado y la competencia entre países vecinos por un mejor lugar en un mercado del exterior. Necesitamos nuevas reglas que permitan reducir la dominancia de las monedas globales con sistemas alternativos de pagos entre países que prescindan de las mismas. Necesitamos que las reservas de los bancos centrales sean libremente administradas siguiendo criterios soberanos asociados con fines monetarios, crediticios e industrializadores y no como condición exclusiva de respaldo de la emisión monetaria.

Se trata de nuevas reglas de circulación y producción financiera que replieguen la lógica de las finanzas sobre la dignidad de los pueblos, que ayuden a orientar el crédito y generar mejores condiciones de vida. Esto exige poner fin a la cultura de las finanzas desligadas de la producción y establecer una ligazón profunda con los derechos humanos (que no son más que la expresión universal de los derechos económicos, sociales y culturales que están en la base de cualquier democracia).

Los pueblos y las generaciones conscientes de África y América Latina debemos pelear por una nueva estrategia de integración política, cultural, simbólica y financiera. Estamos juntos en el mismo camino y tiempo de libertad. Ño Far*.

*Wolof es la lengua nativa de Senegal y Gambia. Ño Far significa estamos juntos. Hasta la Victoria Siempre

Nota publicada también en Paco Urondo.

Carta al Papa Francisco para la convocación de una Asamblea Universal de las Iglesias, de las Religiosos y de los Caminos espirituales para un nuevo Orden planetario ético-espiritual

Querido Papa Francisco, nuestro Hermano Mayor

Impulsionados por sus pronunciamientos, especialmente por la encíclica “Laudato Si sobre el cuidado de la Casa Común” por su impactante discurso en la ONU de 2015 y por los tres mensajes e los movimientos populares mundiales, nos animamos escribirle esta carta que contiene una sugerencia madurada en muchos grupos de todos continentes.

Pensamos que es un paso adelante y complementar a los documentos referidos arriba.

Partimos de la constatación, presente en su encíclica, de que el sistema Tierra y el sistema vida pasan por grandes amenazas. Como dice la Carta de la Tierra:”o formamos una alianza global para cuidar de la Tierra y de unos y otros, o arriesgaremos nuestra propria destrucción y a la diversidad de la vida”(Preámbulo).

Las Iglesias, las religiones y los caminos espirituales, particularmente, la Iglesia Católica, son todos portadores de mensajes espirituales y éticos. Tienen una responsabilidad fundamental en hacer avanzar la conciencia de la humanidad y de los dirigentes políticos de los pueblos en el sentido de empeñar esfuerzos para garantizar un futuro bueno para la vida, para la Madre Tierra y para el futuro de nuestra civilización.

Sabemos, querido Papa Francisco, Hermano Mayor, que Usted comparte profundamente esta preocupación con espíritu de esperanza en el poder de la creatividad de ser humano y más que todo en la fuerza vital del Espíritu Creador,”soberano amante de la vida”(Libro de la Sabiduría 11,26).

En razón de todo esto, nos atrevemos hacerle una propuesta por que pensamos que Usted ha alcanzado una autoridad espiritual, moral, ecuménica  y política para iniciar este proceso en nombre de toda la humanidad, como lo ha hecho antes con la encíclica Laudato Si.

Se trata sencillamente pedirle, que el Espíritu lo ilumine, para convocar una Asamblea Universal de las Iglesias, Religiones y Caminos Espirituales para conciliar y profundizar temas que atañen al futuro de nuestra especie y de la diversidad de la vida en la única Casa Común que tenemos.

Imaginamos así la puesta en concreto de sus inspiraciones e iluminaciones.

El tema general podría ser formulado así:

Un nuevo orden ético-espiritual en la economía, en la política, en la sociedad y en los hábitos de cada persona.

Pensamos como mera sugerencia algunos tópicos que nos parecen esenciales:

  • La espiritualidad, como un proceso antropológico en marcha en cada ser humano;
  • El agua como bien natural, esencial, común e insustituible;
  • La sostenibilidad de todos los seres, especialmente de la naturaleza y de la vida.
  • El hambre en el mundo y el derecho a una alimentación saludable y suficiente para todos;
  • Los derechos de la Madre Tierra y de la naturaleza;
  • Los derechos de los pueblos a su soberanía y al respeto de sus culturas y tradiciones;
  • Los derechos humanos individuales y sociales;
  • Condenar todo tipo de guerra especialmente preventivas y elaborar propuestas de paz.
  • El derecho a un desarrollo pleno de la conciencia;
  • La economía solidaria de los bienes comunes de la Madre Tierra y da Humanidad;
  • La urgencia de una gobernabilidad plural del planeta Tierra. Y así realizar lo que se dijo en la Academia Pontificia de Ciencias en su documento:”Humanidad y naturaleza sostenible: nuestra responsabilidad”: “una redistribución justa de la riqueza, lejos de ser inalcanzable, las bases tecnológicas y operativas de un desarrollo sostenible ya están disponibles o bien de fácil acceso”.

Estas son solamente algunas sugerencias.

Evidentemente cada grupo invitado tratará de traer su cuerpo de especialistas y de conocedores de los temas en cuestión. Otras personas de notorio saber y de buena fe, independientemente, de su inscripción religiosa o espiritual, deberían ser invitadas.

Querido Papa Francisco, fué con mucha reflexión y oración que nos vino esta propuesta que seguramente Usted sabrá valorar. Pedimos al Espíritu que lo ilumine con sus inspiraciones y conduzca semejante propósito a su realización urgente, especialmente por los más vulnerables. Será abierta y sin plazo para ser concluida.

Con nuestras oraciones y deseos, expresando nuestra admiración y total apoyo a sus iniciativas universales, humanitarias, valientes y evangélicas.

Promovido por Observatorio dela Riqueza para un Nuevo Orden Financiero y Comunicacional Padre Arrupe , Guillermo Robledo – coordinador.

Adherir : añadir su firma en el formulario disponible en esta misma página.

(publicado también en https://leonardoboff.wordpress.com/2017/02/18/carta-ao-papa-francisco-para-a-convocacao-de-uma-assembleia-universal/ )

Adhieren:

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Marcelo Barros, monge beneditino, teólogo, escritor e assessor de movimentos sociais. Atualmente, coordenador latino-americano da Associação Ecumênica de Teólogos/as do Terceiro Mundo (ASETT)

Frei Betto,  escritor, Brasil

Manfredo Araújo de Olveira, Grupo de Emaús Brasil

Newton de Figueiredo Filho Professor Universidade Federal de Itajubá, Brasil

Gehorge Artmando (Pará) – Engenheiro Agrícola – Consultor em Agroecologia & Permacultura Núcleo de Estudos em Agroecologia- Rural/IF/Sudeste- Muriaé-MG

Pedro A. Ribeiro de Oliveira – leigo católico – Juiz de Fora – MG – Brasil

Mauro Perini – Presidente

Instituto IBRA per le relazioni sociali economiche e cultural itra Italia e Brasile

Mozar Costa de Oliveira, Santos, São Paulo

Leonardo Ferreira Rocha

Maripá de Minas – Minas Gerais – Brasil

Mario Gutierrez Morales – FIATPAX, HAGAMOS LA PAZ, Managua NIcaragua.

Prof. Dr. André Barroso – Laboratório de História das Experiências Religiosa – IH – UFRJ

Edmundo Nunes dos Santos

Santiago calderon sanchez, Berge Teruel. España.

Luiz Alberto Gómez de Souza, sociólogo, Universidade Candido Mendes

Lucia Ribeiro de Souza, socióloga, ISER Assessoria.

Klaus da Silva Raupp

Edson Neris Bahia Assistente Social, Belo Horizonte – MG – Brasil

Edvaldo Nabuco.

Herbert C. de Lima Brasilia – DF

Zilda Maria e José Maria Villela (Rio, Br)

Comunidad «Encuentro y Liberación» de la Ciudad de Córdoba

Miguel Carter, PhD Bissau, Guinea-Bissau

Luiz Fernando Rangel Tura, médico; Pesquisador do Laboratório História, Saúde e Sociedade/ UFRJ/ Brasil

Carlos Antonio Fragoso Guimarães

João Pessoa, Paraíba, Brasil

María Clara Bingemer Brasil

Profº Francisco de Assis Breda

Edna Camargo Brasil

Reinaldo Reis

Rozanya Santos

Igor Ferreira Isidro – Engenheiro de telecomunicações

MSc. Luiz Ariovaldo Fabri Junior PhD Student – University of Campinas

Cleber Antonio dos Santos, advogado trabalhista brasileiro, residente na Cidade de Niterói, Estado do Rio de Janeiro

Mario Cintra Ramos

Isabel Bahia Diniz

Mauro Negrette

Wender Ferreira dos Santos. Sou de Luziânia Goiás

Nelson Magalhães da Costa Filho

R. Apacê, São Paulo, SP – Brasil,

Thiago Damato Brasil

José Rodríguez Lima

Teresa Arocena

Emerson Sbardelotti

Adelia Sylvia Penna Ramos

Bonito, Bahia

Jorge Paulo

CARLOS MALDONADO

Cleber Antonio Do Santos

Felipe Feijoao – estudante de filosofia e colaboro com jornais e portais eletrônicos, Fortaleza, Brasil

Rev Walter L Coleman – Pastor, Familia Latina Unida Ministries Lincoln United Methodist Church

Rev Emma Lozano , Pastor, Familia Latina Unida Ministries, Lincoln United Methodist Church

ECS Galdoks Brasil

Rosangela Tardeli de Andrade

 

“El financiero es un sistema de saqueo”

Por Verónica Engler
Hace justo un año, el Papa recibía en audiencia privada a dos compatriotas suyos, Guillermo Robledo, líder del Movimiento Hélder Cámara para la Paz entre las Religiones, y Eduardo Murúa, representante del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas. En esa oportunidad, ambos dirigentes –que tenían relación con Francisco desde que era el cardenal Jorge Bergoglio– pudieron alcanzarle una propuesta, basada en la encíclica Laudato Si, que consistía en la creación de un Observatorio de la Riqueza, cuyo objetivo central es diseñar un nuevo sistema financiero y comunicacional mundial capaz de beneficiar a las mayorías populares que hoy quedan habitualmente excluidas de las riquezas de sus naciones. Ese proyecto se concretó en Buenos Aires pocos meses después del encuentro con el Papa a través de una amplia convocatoria a la que concurrieron destacadas figuras del ámbito económico, académico, artístico, sindical y empresarial de la Argentina. Guillermo Robledo, coordinador del Observatorio de la Riqueza, afirma en charla con PáginaI12 que la Laudato Si “cuestiona profundamente al sistema económico y habla de la obsolescencia del sistema capitalista internacional”. En sintonía con esta idea, desde la creación del Observatorio se realizaron varias reuniones y elaboraron algunos documentos en donde se da cuenta del funcionamiento del sistema financiero en la Argentina, reglado básicamente por una ley que data de la época de la última dictadura cívico-militar. “Este sistema lleva cuarenta años fugando capitales al exterior, que es lo mismo que fugar nuestra riqueza –denuncia Robledo– y en el último año este modelo se ha profundizado”.

–¿Cómo es el origen del Observatorio de la Riqueza?

–El Observatorio nació de una convergencia del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas y del Movimiento Hélder Cámara por la Paz entre las Religiones y los Pueblos, que yo presidía. Nosotros teníamos una relación con (el Papa) Francisco previa, veníamos trabajando el tema de un Tercer Concilio Vaticano, desde hace cinco años, y cuando él llega a Papa le llevamos una serie de propuestas, y eso desemboca en una idea, junto con una parte de los movimientos sociales. La idea era que si la Universidad Católica (UCA) tiene el Observatorio de la Pobreza, nosotros, el pueblo, teníamos que hacer el Observatorio de la Riqueza. En realidad la idea había quedado picando hace varios años atrás, cuando las comunidades eclesiales de base de Quilmes, en la época en que yo era funcionario del municipio, en una reunión nos planteaban que ellos habían querido que el Observatorio de la UCA fuera de la Riqueza y de la Pobreza, de las dos cosas, y la UCA no aceptó. Entonces, le llevamos la idea a Francisco y nos dio su aceptación, y ahí arrancamos. Volvimos a la Argentina e hicimos una convocatoria amplia, no sólo de un sector de pensamiento político o ideológico

–¿Ustedes recurrieron a un grupo de científicos de la Universidad de Buenos Aires para trabajar sobre la Laudato Si?

–Sí, porque nosotros pensamos que para poder llevar adelante esas metas éticas, filosóficas y religiosas que plantea Francisco, hace falta algún tipo de diseño científico. Por eso nos planteamos analizar cómo funcionan los flujos de riquezas, y cómo se puede cambiar esa dinámica, de una manera científica. Fuimos a buscar qué antecedentes tenía la Argentina, y encontramos algo muy rico, que fue la experiencia que se hizo en los años setenta en la Fundación Bariloche, presidida entonces por el físico Carlos Mallmann (padre de Francis, el cocinero), quien decide dar una respuesta desde Latinoamérica a un modelo matemático  (The World3) que había sido desarrollado por los centros de pensamiento internacional, que planteaba la necesidad de poner un freno al ritmo de crecimiento demográfico y económico. Y la Fundación Bariloche produce lo que se llama el Modelo Mundial Latinoamericano, y un grupo de científicos lo ha reflotado en los últimos años mediante un verdadero trabajo de arqueología computacional, porque eso estaba en los primeros lenguajes de programación. Uno de los trabajos del Observatorio es fusionar aquel trabajo argentino de la Fundación Bariloche con las ideas que plasmó Francisco en la encíclica, para un nuevo orden financiero mundial, y obviamente social y de poder.

–Desde el Observatorio ustedes publicaron algunos documentos en donde analizan la situación de Argentina, y sobre todo los cambios que hubo desde diciembre de 2015, con datos muy alarmantes en relación al endeudamiento del país y a la gran fuga de capitales hacia el exterior.

–A nivel local, lo que nosotros hemos descubierto en este año de investigación es que los flujos financieros están bifurcados por el Estado entre lo que maneja el Banco Central y lo que se maneja de presupuesto del Estado nacional, por una razón que no entendemos. Nosotros creemos que debe estar unificada. La sociedad, el poder político, el Parlamento no tiene la visión de conjunto de la masa de intereses que paga el Estado nacional, una parte por el Banco Central y otra parte por el presupuesto nacional. Cuando el Congreso aprueba el presupuesto nacional, aprueba la mitad de los intereses que paga, y por otro lado el Banco Central paga por otros conceptos sin aprobación parlamentaria, lo que da una cifra que es la que plasmamos en nuestros documentos, que está proyectada para el año 2017 de casi quinientos cuarenta mil millones de pesos. El Congreso ha aprobado doscientos cuarenta mil, y el Banco Central paga intereses de otro tanto por intereses. Eso da una cifra que es realmente la causa del empobrecimiento, porque es una masa de recursos que termina en los paraísos fiscales. La desproporción que hay entre esos quinientos cuarenta mil millones de pesos al sector financiero y diecisiete mil, por ejemplo, al sector científico, o sesenta mil millones de pesos al sector de la salud, demuestra claramente que hay algún problema estructural en el manejo del Estado, que es el que causa la pobreza. Las desproporciones son escandalosas, y el hecho de que no estén unidos los dos conceptos es una debilidad política que es la que nosotros hemos tratado de instalar desde el Observatorio, que se unifique lo que se conoce como “déficit fiscal financiero” y “déficit cuasi fiscal”.

–¿Cuál es la diferencia entre uno y otro?

–Que uno lo paga el Banco Central y el otro lo paga el presupuesto nacional. Ahora, los conceptos y los beneficiarios son los mismos, son intereses pagados por mayor endeudamiento a los bancos que terminan en paraísos fiscales. Porque cuando uno lee las cuentas del Banco Central determina que el flujo financiero termina en el exterior, porque con el nuevo gobierno están liberados los capitales. No hay ningún elemento que haya demostrado en las cuentas del Estado que ese flujo de intereses pagados en el país ha sido reinvertido.

–¿Cómo caracteriza a este sistema financiero?

–Es un sistema de saqueo.

–-Pero este sistema no se instaura en diciembre de 2015, ¿no?

–No, en realidad es un déficit de los cuarenta años de democracia, pero en el último año se ha agudizado. Pero es un problema que arranca en la ley de entidades financieras de la dictadura y que, lamentablemente, hace cuarenta años que estamos en democracia y todavía no se ha modificado. Ése es el corazón del problema.

–¿Como funciona este sistema financiero de saqueo?

–Bueno, no se puede hablar de la ley sin hablar de otro aspecto que también está silenciado que es el incremento de la riqueza físico-biológica de la Argentina a lo largo de estos cuarenta años. A nosotros los medios de comunicación, los comunicadores intencionados, nos convencen de que somos un país pobre, o una región pobre. Pero el incremento de la productividad física de los argentinos en los últimos cuarenta años, del campo, la industria, las comunicaciones, el transporte, etcétera, ha sido casi de catorce a uno, o sea, somos catorce veces más productivos en términos físicos que hace cuarenta años. Este sistema financiero lo que hace es monetizar esa mayor riqueza en forma tal que la neutraliza como riqueza nacional y la transfiere al exterior. Nosotros como Observatorio denunciamos que somos cada vez más ricos en términos de productividad físico-biológica y cada vez más pobres en términos monetarios financieros por ese sistema financiero, que es evitable. No es que esto es una situación universal que siempre ha sido así en todos lados, porque cuando se compara con otros países del mundo, se ve que hay distintos mecanismos que han permitido que el incremento de la riqueza física de las naciones se quede en su país, como por ejemplo el caso noruego, el chino, el mismo modelo brasileño ha radicado mucha más riqueza en términos financieros que el modelo argentino. Entonces, hay distintas opciones, pero Argentina tiene el sistema financiero más retrógrada, donde todo ese incremento de productividad se monetiza al dolarizarse, y cuando se dolariza en camino a los paraísos fiscales no se socializa el aumento de la productividad física.

–¿De qué manera se profundizó este modelo en el último año?

–En la época del gobierno kirchnerista se puso freno a esa dinámica, no del todo, pero se acotó el problema, con limitación a los flujos de capitales, de giro de utilidades al exterior, y demás. Pero las medidas del gobierno actual han liberalizado totalmente, hoy los flujos entran y salen, casi sin producir información de destino, entonces eso automáticamente genera mayor transferencia de riqueza al exterior, y de hecho eso es lo que ha pasado en el 2016. Si nos hemos empobrecido ha sido porque se han caído las limitadas y acotadas barreras que había puesto el gobierno anterior.

–¿Cuáles eran las medidas que limitaban ese funcionamiento en modalidad de saqueo del sistema financiero?

–La limitación a los flujos de capitales, el pedido de autorización para mandar las utilidades al exterior, la pelea con los fondos buitre y la limitación en las tasas de interés. Las políticas del Banco Central eran completamente distintas, las tasas de interés aumentaron el ciento por ciento con este gobierno respecto de la política que tenía el Banco Central antes, tasas de interés del veinte pasaron al treinta y ocho por ciento. Desde lo financiero el liberalismo es absoluto. El Banco Central hoy es un mecanismo de entrada y salida de capitales en el día, sin el menor mecanismo de política de inversión. De hecho, las únicas políticas de inversión que puede registrar el gobierno actual son inversiones financieras con alta rentabilidad en dólares. No hay ningún lugar del mundo que tenga una rentabilidad del treinta y pico por ciento en dólares como tiene la Argentina en este año.

–¿De qué manera se relaciona la crisis que se está viviendo en la región con la de los países centrales?

–Esta pregunta me dirige a otra pregunta: ¿por qué observar la riqueza es viable e imprescindible? Porque la crisis mundial es una crisis de sobreproducción, debido a la revolución tecnológica exponencial, por la revolución de la automatización, la nanotecnología, las comunicaciones. Y esa sobreproducción genera deflación. Yo sé que hablar en Argentina de deflación parece chino, parece de otro planeta porque vivimos en una inflación, estamos al revés, pero el mundo está en deflación. Esa deflación que es producto de la sobreproducción hace que los poderes centrales hayan tomado una decisión política, que en algunos planos es política militar o paramilitar, de que determinadas regiones del mundo se retroceda. Los continentes que están afectados por esa decisión de los países que hoy son hegemónicos en el mundo son América latina, África y el Medio Oriente. Esas tres regiones tienen una debilidad estructural porque no tienen moneda común, no tienen un sistema financiero para protegerse de la deflación, entonces son los que están sometidos a las tormentas más virulentas, más salvajes. En realidad hoy la OTAN está poniendo en práctica el mismo diagnóstico que tenía el club de Roma en los setenta: hay que frenar el crecimiento en los países en desarrollo. En realidad es una estrategia de los países centrales de diferir la crisis de deflación y sobreproducción, pero no la resuelven. De hecho, expresiones políticas como el triunfo de Trump o el Brexit en Europa son quiebres de un esquema que no cierra, con clases medias en decadencia. Porque la deflación va a afectar más a las clases medias del mundo que a los pobres del mundo, porque los pobres ya son pobres.

–Ustedes también plantean, además de la cuestión financiera, la necesidad de un nuevo orden comunicacional, ¿a que se refieren?

–Nosotros aspiramos a que los sectores populares vean que hay una alternativa, porque hoy el estado de retroceso y de resignación que viven los pueblos en el mundo se debe a que el sistema mediático los convence de que esto es lo único posible. El sistema financiero se mantiene por el sistema comunicacional. Una corrida bancaria la arman los diarios. Qué moneda es fuerte y qué moneda es débil no está determinado por el respaldo en oro o en dólar, eso es un tema mediático, sobre todo en un país rico. Que un país rico o un continente rico estén dolarizados es un problema mediático. La historia demuestra que la moneda es un consenso. Es mentira que una moneda necesita tener respaldo en otra moneda, eso es ejercicio de poder imperial sobre un país colonizado. No se necesita tener respaldo en oro, salvo para el comercio internacional pero no para el comercio interno. Por ejemplo hay una pregunta que nadie hace: ¿por qué Argentina emite mucho menos moneda que el resto del mundo y está en inflación? ¿Por qué ellos emiten más y están en deflación? Porque es una mentira que hay una relación entre emisión e inflación. Lo que hay es emisión que capturan los monopolios.

-¿Cuáles son las consecuencias para la Argentina de la vigencia de la ley de entidades financieras de la última dictadura?

–Si se fugaron capitales afuera, la base de recaudación del Estado disminuyó, y eso no lo arregla un blanqueo por dos pesitos. Nosotros hicimos el cálculo de la masa de lo fugado en cuarenta años, y si ese capital hubiese quedado en la Argentina la recaudación fiscal del Estado sería doce veces mayor que la actual, no habría déficit fiscal. El ingreso per capita que tendría la Argentina, sin esa fuga de capitales, sería hoy igual al de Noruega.

¿Por qué Guillermo Robledo?

En busca de un nuevo orden

Guillermo Robledo es el coordinador del Observatorio de la Riqueza, surgido en mayo de 2016, cuyo objetivo central es diseñar un nuevo sistema financiero y comunicacional que beneficie a los pueblos del mundo y no a los poderosos de siempre. Muchas de las ideas que nutren el Observatorio vienen del trabajo realizado previamente en el Movimiento Hélder Cámara para la Paz entre las Religiones, del cual forma parte. Además de su militancia social y religiosa, Robledo se desempeñó en la función pública como secretario de Producción y Empleo en el partido de Quilmes, provincia de Buenos Aires, durante la intendencia de Francisco “Barba” Gutiérrez.

El Observatorio de la Riqueza cuenta entre sus integrantes a destacas figuras del quehacer político y social de la Argentina: Raúl Zaffaroni, Pedro Biscay, Mario Cafiero, José Sbatella, Alejandro Vanoli, Vicente Zito Lema, Silvina Batakis, Washington Uranga, Alfredo Zaiat y Clelia Isasmendi, entre otros.

A fines del año pasado, el Observatorio hizo público un documento titulado “Carta al Pueblo y a los legisladores sobre el Presupuesto 2017 en Argentina”. Allí denuncian que durante el presente año la Argentina planea pagar una suma de dinero en concepto de intereses de la deuda (externa) que se elevaría a más del doble de lo presupuestado originalmente para 2016. “La razón de ser de nuestro Observatorio tiene entre sus objetos de estudio el Presupuesto de Estado. En ese presupuesto y su articulación con los Bancos Centrales del Mundo y los Estados Paraísos Fiscales se definen los flujos de riqueza y el daño social sobre los pueblos y las naciones”, explican en el documento.

El 11 de febrero se realizaron actividades en más de cuarenta ciudades del mundo en apoyo a los grupos panafricanistas del Frente Anti franco CFA (Franco de la Comunidad Financiera Africana), entre las cuales se encuentra la participación en Buenos Aires del Observatorio de la Riqueza. Ese día se realizó una reunión en la fábrica recuperada IMPA para hablar sobre las cuestiones que plantean los panafricanistas y sus posibles conexiones con la problemática de nuestra región. “África sigue teniendo un esquema monetario que es el mismo de la etapa colonial, se liberaron, se independizaron, pero el sistema financiero sigue siendo el mismo”, señala Robledo. Como integrante del Observatorio, Pedro Biscay –director del Banco Central de la República Argentina nombrado por el gobierno anterior– fue el invitado especial en la sesión realizada en París, junto a: Kemi Seba –panafricanista y ensayista–, Nicolas Agbohou –economista y autor de El franco y el euro contra África–, y Toussaint Alain –ex asesor de Laurent Kudu Gbagbo, ex presidente de Costa de Marfil–.

(Publicado en Página12)